miércoles, 2 de enero de 2013

La primera.

Empieza un nuevo año, aunque si te paras a pensarlo tampoco tiene nada de especial, es una fecha como cualquier otra. Más que nada porque a mí los balances me salen mejor con el calendario académico. Será por los años que llevo con ese calendario a mis espaldas, no lo sé.


Empezó siendo una noche rara, para seguir peor aún. De todas formas, podemos decir que terminó bien. Al menos haciendo algo que necesitábamos con gente a la que necesitábamos. Que los abrazos se quedasen en nada, que los besos en simples palabras, y que la gente con la que realmente querías estar estuviese tan lejos, no ayudó para nada.
Pero al menos, esa gente tan lejana, fue la que me dio fuerzas para seguir ahí, y darlo todo en una noche demasiado extraña. Por esa conversación, primero por teléfono y luego por wasap (ya sé que no se escribe así, jum); por las mil frases de "sonríele a la vida" y "sal a comerte el mundo" que tanto he dicho y me ha dicho este año; por las largas conversaciones por tuenti sobre lo raro que es el mundo y el corazón; por las locuras en Mieres/Oviedo... por todos ellos, los causantes de esos momentos (espero que sepáis quiénes sois cada uno).



Gracias a todos los que, aún estando lejos, supisteis estar conmigo ese día. 
Lástima que la cercanía o lejanía no sea sinónimo de saber cómo te sientes, de empatizar contigo. El mundo es extraño, y a veces la gente que piensas que más te conoce, no es tal. El calor de un abrazo, a veces es mucho más cálido aunque sea leído en un blog amigo, o en otro caso.

¡¡FELIZ AÑO A TODOS!!

5 comentarios:

  1. Mi noche tampoco estuvo para echar cohetes la verdad, al final acabo pasándomelo mejor cualquier otra noche del año que en la noche de Nochevieja! jajaja

    Yo desde aquí te envío un abrazo grande que espero que te llegue! :)

    ResponderEliminar
  2. Paula, querida, si es que a veces celebrar algo no hace que sea mejor... ¿Qué tal los reyes? ¿se portaron bien?
    Al menos hay que pensar que salí a bailar y retomé el contacto con alguien que pensé que ya no hablaba. ¡Lástima que ese alguien esté lejos de mí! Para variar...

    Hace tiempo que he pensado lo siguiente: no puedes estar haciendo cosas por la gente que no hace nada por ti. Y digo más, si te cuesta hacer algo por alguien, es que no lo merece, así que no lo hagas.

    Por tanto: ¡¡cambio de dirección a la vista!!

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Está claro, yo siempre he dicho que si alguien realmente quiere algo, lo hace, así que uno: si no lo hacemos es porque no queremos en el fondo y dos: si la otra persona no lo hace es porque realmente no quiere. No sé, esa es mi conclusión.. jajaja

      ¿Por qué vas a estar siempre ahí? ¿Has luchado? Sí. ¿Lo has intentado? Sí. ¿Estás cansada de seguir así y de ser la única que está ahí? Pues si es así, cierra esta etapa y ya sabes, a cortarse el pelo, a teñirse o lo que sea, a cometer locuras!! :)

      Eliminar
  3. Cerrar etapas, abrir nuevas. Siempre da miedo, pero bueno, hay que empezar con lo más sencillo, poco a poco, para terminar haciendo grandes cambios. Yo de momento he cambiado las sábanas, ¿eso cuenta?

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Es un paso pequeñito, pero podemos decir que cuenta jajaja

      Eliminar