Pasado, presente y futuro.

Me llamo Raquel, y he decidido recuperar alguno de aquellos test que nos pasábamos hace ya mucho tiempo. Lo he decidido por mi situación, porque estoy segura de que así soy capaz de mejorar las cosas (cada uno tiene su método). Así que allá voy.

- -  Si tuvieses alas, ¿a dónde volarías?

A Mieres. Recuerdo con demasiado cariño mi año allí. Conocí grandes personas y amigos, los paisajes son preciosos (pasar por la central térmica de camino a Oviedo no tiene precio).

-- - ¿Cómo te ves en estos momentos?

Como una persona que puede conseguir casi todo lo que se proponga. Gracias a una tarde y noche de ayer productiva, puedo decirlo con optimismo.

- - ¿A qué estás esperando?

No creo en que esperar sea la palabra adecuada. Pero sí, espero algo, como todos. En mi caso es que sea el momento perfecto para actuar. Aunque ese momento no existe si no lo buscas tú. Así que me dedico a buscar momentos e intentar hacerlos perfectos, como dicen.

-  -  Defínete con una frase de película.

“Siempre que quieras, podrás cambia tu estrella.” Destino de Caballero.

 -  - Si quedasen 24h. para que estrellase un meteorito, ¿qué harías?

Dejaría todo e iría a por lo que realmente me importa (a veces me pregunto por qué no lo hago ya, pero sigo esperando el momento).

   -  ¿Cuál es tu mayor logro?

Creo que llegar donde he llegado con la carrera, que estoy a punto de terminarla. Muchos fueron los que se interpusieron en el camino para intentar evitarlo, pero aquí estoy, incluso gracias a sus zancadillas.

  - - ¿Cuál es la última lección que has aprendido, por pequeña que sea?

Que cualquier día puede ser importante. No importa como empiece, no importa los objetivos que tengas para ese día, nada importa. Sólo importa el cómo se desarrollan las cosas y el final, sobre todo el final.

-  - ¿Planes para este año?

Terminar IG, viajar, ir al XI Encuentro de Jóvenes Investigadores en Paleontología, y ser feliz.

-    - ¿Libro favorito?

Tengo muchos, pero por decir uno que me marcó: Dónde el corazón te lleve.

A parte de ese, diría: La reina oculta, La historia del rey transparente, Marina, La llave del tiempo y Luces de Bohemia.

-  - ¿Qué es lo que más recuerdas de tu paso por el instituto?

La acampada en Los Molinos de Crevillent, con la cabaña del buen rollito, los monfortinos y todo lo que aprendimos.

Los momentos del patio donde nos juntábamos todas las amigas a contarnos el día a día. Por algo fue en ese momento cuando nos conocimos y empezamos a salir juntas.

Y los gritos de “Maiiiiinco, Maiiiiinco” al animar a los chicos de Monforte en cualquier chorrada que hubiese en el instituto.

-    - Si fueses a una isla desierta, ¿qué tres cosas te llevarías?

Un libro, una linterna (para leer por la noche) y una garrafa de agua lo más grande posible (mientras encuentro agua “potable” habrá que sobrevivir).

-  - ¿Planear o hacer locuras?

Hacer locuras, pero siempre se planean, en mayor o menor medida.

-   -  ¿Frase de libro con la que más te identificas?

Tots tenim un secret tancat amb clau a l’àtic de l’ànima. Aquest és el meu.

Realmente puede que no veáis la utilidad, pero creedme por una vez: todo lo que sirva para conocerse uno mismo es válido para mejorar. Cualquier cosa, por pequeña que sea. Todo lo que hemos vivido nos ha llevado a ser como somos, y eso determina, de alguna forma, cómo seremos. 

Reto Cuento.

Algo muy importante está a punto de ocurrir, y todo está listo para el gran momento. ¿Todo? Bueno, quizás todo no... Falta la gran estrella. Pero su sustituta... ¡es diminuta! A veces no importa tanto el tamaño de las cosas y de los sentimientos como la fuerza y la perseverancia con que se lucha por conseguir los sueños. Esta es la historia de una pequeña estrella que consiguió con su humildad uno de los más difíciles y complejos retos: alumbrar uno de los momentos más importantes del año: la Navidad. A través de esta simpática aventura y sus bellas ilustraciones, los niños descubrirán jugando que la humildad, la alegría y la generosidad son más grandes que el mayor de los problemas.

Este cuento me impresionó, y aquí os dejo mi foto. Una pequeña contribución al Reto Cuento. El cuento en cuestión es "La pequeña estrella de Navidad".
Aquí tenéis el enlace para ver el resto de fotografías participantes en el reto y aquí el grupo que tenemos en facebook.

Por Mari y por las locuras.

Tengo tantas cosas que decir y no sé por dónde empezar.

Estas semanas se presentan un poco agobiadas. Básicamente porque en la escuela de idiomas (voy a alemán, por si queda alguien por saberlo) han puesto el examen de la segunda FIS justo en medio de mis dos exámenes de la universidad. A parte de poner también el oral de la primera FIS. 

Así que en resumen tengo:

24: geología histórica y regional.

25: oral de la 1º FIS.

28: escrito 2º FIS.

29: petrología ígnea y metamórfica.

30: oral de la 2º FIS.

A parte de empezar el segundo cuatrimestre el mismo 30. Sí, a partir del domingo termina mi vida "tranquila".

En fin, que para coger fuerzas, o morirme de estrés, unos días antes iré a Logroño con mi compañera de piso de cuando vivía en Mieres, Mari, que nos presentamos a un concurso. Ya veremos lo que sale de ahí, pero me voy 21 y vuelvo el 23 de madrugada, va a ser bonito.

Y ahí va un pequeño recorrido de mi vida con esta muchacha, de las locuras, de los cambios de ropa, de mil cosas y bailes que nos hemos pegado.
Sólo por eso merece la pena volver a verla. Porque se hace de querer. 

Alegría.

Pensaba en otra entrada, pero tendrá que esperar.

Porque hoy, en el momento menos esperado, alguien me ha dicho que se ha acordado de mí, que me echa de menos. Aunque no lo esperase, aunque no sea lo que has esperado, eso te anima el día, claro que sí. Muchas gracias a esa persona.
Mis compañeros de clase son geniales.



Y ahora estoy disfrutando de estas dos grandes voces italianas: Laura Pausini y Tiziano Ferro. Dos voces que pertenecen a dos grandes personas. Por mucho que pase el tiempo, seguiré recordando a esa niña de 6 años feliz con su disco de Laura, escuchándolo a cada hora y sabiéndose cada una de las canciones. Por el concierto que vi con mi amiga Lorena en Madrid. Por tantos momentos en los que me han acompañado sus canciones.

Sencillamente, porque si no vas a por tus sueños, ellos no vendrán a ti.

La primera.

Empieza un nuevo año, aunque si te paras a pensarlo tampoco tiene nada de especial, es una fecha como cualquier otra. Más que nada porque a mí los balances me salen mejor con el calendario académico. Será por los años que llevo con ese calendario a mis espaldas, no lo sé.

Empezó siendo una noche rara, para seguir peor aún. De todas formas, podemos decir que terminó bien. Al menos haciendo algo que necesitábamos con gente a la que necesitábamos. Que los abrazos se quedasen en nada, que los besos en simples palabras, y que la gente con la que realmente querías estar estuviese tan lejos, no ayudó para nada.
Pero al menos, esa gente tan lejana, fue la que me dio fuerzas para seguir ahí, y darlo todo en una noche demasiado extraña. Por esa conversación, primero por teléfono y luego por wasap (ya sé que no se escribe así, jum); por las mil frases de "sonríele a la vida" y "sal a comerte el mundo" que tanto he dicho y me ha dicho este año; por las largas conversaciones por tuenti sobre lo raro que es el mundo y el corazón; por las locuras en Mieres/Oviedo... por todos ellos, los causantes de esos momentos (espero que sepáis quiénes sois cada uno).

Gracias a todos los que, aún estando lejos, supisteis estar conmigo ese día. 

Lástima que la cercanía o lejanía no sea sinónimo de saber cómo te sientes, de empatizar contigo. El mundo es extraño, y a veces la gente que piensas que más te conoce, no es tal. El calor de un abrazo, a veces es mucho más cálido aunque sea leído en un blog amigo, o en otro caso.

¡¡FELIZ AÑO A TODOS!!